Felicitas del Pilar te cuenta “el lado oscuro de historia”

Por Jericles

En su primera aparición en el nuevo año, vuelve Felicitas del Pilar Dorrego a darnos una lección de historia. Pero no esa historia de cartón pintado que nos muestran Pacho O’Donell, o Felipe Pigna, si no la verdadera historia, con sus grandezas pero también con sus más profundas miserias.Felicitas presentará esta noche en Pihué Bar su último libro revisionista intitulado “Los próceres también se comían los mocos”El libro está prologado de manera pos-mortem por Lucio V. Mansilla, y para hacerlo más ameno Felicitas le agregó dibujitos de su nieta, que está concurriendo a una salita de cuatro.De ese libro suyo, a manera de anticipo, hemos seleccionado algunas perlitas de la historia, la verdadera historia, esa que Félix Luna te ocultó sin miramientos.Por ejemplo…¿Qué imagen se te viene cuando te nombran al abuelito de Heidi?(….)La verdad es que ese señor austríaco, bajo ese aspecto bonachón tenía sucios negocios con la mafia napolitana, fue procesado un par de veces por tener en los fondos de su casa campestre una cocina de cocaína y regenteaba un cabaret donde trabajaban damas y caballeros de la tercera edad. El cabarute se llamaba “El geriátrico del pecado”, y fue la gota que rebasó el vaso, ya que por ese motivo las autoridades de Austria le quitaron la tenencia de la pobre Heidi, que por suerte y a pesar de la mala influencia de su abuelito, logró finalmente triunfar en el mundo del espectáculo.Y lamento desilusionar a todos los seguidores de Mao y su doctrina, pero Felicitas investigó a fondo a este señor chino y gracias a eso podemos saber que Mao, tras su fachada comunista, tenía una doble vida: era fanático de la comida chatarra de Estados Unidos (de ahí viene su sobrepeso), en Pekin iba a una academia de baile para aprender a bailar zapateo americano (cuando falleció ya casi imitaba a la perfección a Fred Astaire en “Cantando bajo la lluvia”) y tenía la colección completa de Penthouse y Play Boy. Y de esas revistas, íconos del decadente estilo de vida occidental, Mao debIó haber sacado ese poster tamaño natural de Marilyn Monroe desnuda sobre una alfombra roja que colgaba en su despacho.Sorpresas te da la vida, Pablo…¿Quién se iba a imaginar que cuando Mark Chapman mató a John Lennon, al allanar la casa del asesino se encontraron con la colección completa de casetes de Los Manseros Santiagueños? ¡Y las paredes estaban repletas de fotos autografiadas por El Chango Nieto, José Larralde, Argentino Luna y Ramona Galarza!Y otro que no resistió la lupa investigadora de Felicitas del Pilar Dorrego fue Ernesto Sábato: el notable autor, antes de escribir “Sobre héroes y tumbas”, había intentado sin éxito todo tipo de literatura: escribió novelas románticas como las de Corin Tellado, un libro sobre cábalas infalibles para ganar la quiniela a tres cifras, y hasta una biografía no autorizada de Palito Ortega.Y nos vamos despidiendo de esta columna con otro chisme escandaloso, sobre un romance secreto que involucra a dos queridas figuras del mundo del espectáculo argentino de todos los tiempos:Parece que la tortuga Manuelita de María Elena Walsh, cuando se fue a Paris, conoció al Zorzal Criollo Carlos Gardel, que en aquel entonces triunfaba en la Ciudad Luz. Fue un flechazo instantáneo, el romance no fue muy largo pero sí muy intenso.La canción de Manuelita dice:“En la tintorería de París / La pintaron con barniz. La plancharon en francés / Del derecho y del revés. Le pusieron peluquita / Y botines en los pies”¡Y según la investigación realizada por nuestra historiadora,fue el propio Gardel el que le pagó el viaje a Francia y el costoso tratamiento embellecedor a la tortuga más famosa!** (Música Manuelita)¡Qué historias, ¿no? ¡Y mientras siga apareciendo el lado oscuro de estos célebres personajes de nuestra historia, ahí estará Felicitas del Pilar Dorrego para venir a contarlo en nuestro programa!JERICLESLa verdad duele.-Antes de escribir “El Capital”, Marx probó, sin demasiado éxito,Borges, de joven, militaba en la juventud sindical de la Federación Agraria ArgentinaComo verás, nada es lo que parece en nuestra historia…Me gustaComentarCompartir