Las lecciones filosóficas del concejal Chiappe

Por el doctor José Sagarraga, integrante de Respeto

EL concejal Chiappe, sube nuevamente después de cuatro años en el ejercicio de su cargo de edil de la ciudad, a la torre de marfil académica y nos “ilustra” acerca del pensamiento de Aristóteles, lo que nos permitiría resolver la encrucijada en la que se encuentra la ciudad toda, de llevar a cabo la elección municipal en un escenario de pandemia. Aparece una publicación en un medio local, donde el concejal encuentra la solución a semejante dilema en una afirmación que hace siglos hacía el gran filósofo griego, “el yerro no está en la ley ni en el legislador sino en la naturaleza propia de “la cosa práctica”……que la sabiduría consiste en encontrar las soluciones en estado de evaluación y deliberación permanente en las circunstancias”.Esto, es lo que hicieron en el seno de la Junta Electoral, la mayoría de las fuerzas políticas reconocidas para participar de la elección. Desde el primer momento, la posición del Partido Respeto, fue la de celebrar un “acuerdo entre todas las fuerzas políticas legitimadas para competir en el comicio, a los fines de solicitar al Concejo Deliberante la promulgación por unanimidad de todas la fuerzas políticas con representación legislativa, de una ordenanza que prorrogara todos los mandatos del gobierno municipal, hasta que estuvieran dadas las condiciones para celebrar el acto comicial”. A los pocos días, un grupo de ex convencionales constituyentes del Partido Justicialista (Ricardo Muñoz, Omar Isaguirre, Osvaldo Da Costa, Gonzalo Otero Pizarro, Eduardo Massa, y Eduardo Mugnaini), puso a la consideración pública un documento, que vino a enriquecer el debate. Los juristas del Partido Justicialista, se pronunciaban por un gran acuerdo político que incluía no sólo a todo el arco político democrático, sino también a todos los sectores económicos y sociales, que solicitara al Concejo Deliberante la promulgación de una ordenanza de enmienda de la Carta Orgánica, que prorrogara los mandatos y se fijara una nueva fecha de elección ad-referendum de la voluntad popular. La semana siguiente, el Colegio de Abogados de la ciudad, organizó un debate en el que el apoderado de la Alianza Juntos por el Cambio (Sergio Bevilacqua). analizaba pormenorizadamente los distintos escenarios, y concluía proponiendo un consenso entre todas las fuerzas políticas para encontrar la solución al conflicto. El gobierno municipal encontró, seguramente luego de analizar las distintas posiciones, que debía impulsar la expresada por el Partido Respeto, ofreciendo un acuerdo entre los partidos políticos reconocidos por la Junta Electoral, solicitando al Concejo Deliberante una ordenanza promulgada por unanimidad, fijando dos fechas probables para la realización de los comicios, prorrogando los mandatos de todos los funcionarios. El acuerdo fue suscripto por cinco de las ocho fuerzas legitimadas por la Junta Electoral. La ordenanza fue confirmada por el Tribunal Superior de Justicia de la Provincia.En la actualidad, nos encontramos en una situación muy distinta. Tenemos en la ciudad al día de hoy más de 600 contagios y cuatro muertos desde la aparición de la pandemia. Sin embargo el Concejal Chiappe, refiere que “algunas voces presas del pánico y en cómoda articulación con el discurso antipolítico convergen en recitar la letanía que es mejor dejar de lado el proceso electoral en cualquiera de la fechas previstas por la ordenanza”.Las distintas fuerzas políticas se han pronunciado por posponer la realización de la elección. Solo la Alianza “ES RIO CUARTO” que lleva como candidato a Eduardo Scoppa y el “PARTIDO RESPETO” que promueve la candidatura de Lucía de Carlos, se han pronunciado por suspender las elecciones hasta que estén dadas las condiciones para emitir el sufragio. RESPETO sostiene no solo que se posponga la elección hasta que se encuentren las condiciones adecuadas para votar, sino que se disponga una nueva prórroga de los mandatos municipales para que el Intendende Municipal cuente con “los estamentos y cuadros estatales” como pide el concejal para asegurar la gobernabilidad.No creemos realmente que la agrupación que representa Eduardo Scoppa, ni los militantes de RESPETO piensen que todos nuestros males estén en los dirigentes políticos. En el caso de RESPETO, sus militantes están convencidos de que la actual democracia representativa de Río Cuarto funciona como un ritual electoral organizado en torno a un binomio “oficialismo-oposición” que no representa proyectos políticos diferentes sino más bien como agrupaciones políticas que funcionan como un mecanismo que facilita el ascenso económico y social de sus miembros, mientras está prácticamente congelada de movilidad social para el resto de la población. El concejal Chiappe ha encontrado en el Intendente Municipal un nuevo tipo de “líderazgo weberiano”. RESPETO cree en la fuerza de lo colectivo.