Juicio a Macarrón – Las pruebas genéticas y forenses en una etapa clave del juicio

“Había un puñado de pelo en la mano de la víctima y estimo que no era de ella, si había cabello de la víctima en el lazo”, afirmó ante la prensa el doctor Martín Subirachs, tras declarar en el juicio a Marcelo Macarrón por el crimen de Nora Dalmasso. Las manifestaciones sorprendieron por el impacto probatorio en juego. El médico forense aclaró, sin embargo: “no puedo decir si esa prueba fue o no peritada, no es algo que nosotros podamos conocer”
Tras las declaraciones del perito de una trayectoria que es elogiada en los ámbitos tribunalicios, fuentes de las fiscalías de los doctores Javier Di Santo y Daniel Miralles, quienes participaron anteriormente de la investigación, confiaron en que “todas las muestras recogidas fueron analizadas”
Según surge de la requisitoria fiscal, en su declaratoria durante la instrucción, la médica forense Virginia Ferreyra señaló que “se recolectaron pelos a la vista, varios en el antebrazo derecho de la víctima, un pelo más largo en la mano izquierda, y en proximidad de éste uno más corto, todo lo
rotuló la policía”.
Además, precisó que “se solicitó cinta de acetato para juntar los pelos que se encontraban en el cuerpo y en la sábanas, pero como no había dicha cinta
disponible, posteriormente, cuando el cuerpo se retiró indicó al personal policial que envolvieran todo bien para que no se perdieran los cabellos….al finalizar el trabajo”.
La autopsia reveló que el cuerpo de Nora fue hallado a las 18 horas del 26 de noviembre de 2006. “Se encontraba desnuda en la cama del dormitorio de su hija, y con lazo de bata de toalla blanca atado al cuello, de manera doble, con nudo doble en zona lateral derecha, por debajo del cartílago tiroides”. El informe determinó que “se constataron signos externos de violencia, principalmente en cuello y región genital, sin signos de defensa ni de lucha”.
Al hacer referencia a las consideraciones médico legales, se determinó “una data probable de muerte de alrededor de 36 horas previas al examen practicado en el lugar del hecho (19.00hs. del 26-11-06)”.
“De acuerdo a los antecedentes recabados, estudio del lugar del hecho y los hallazgos de la autopsia, existen signos objetivos que permiten concluir se trata de una muerte provocada por estrangulamiento mixto a lazo y mano”, indicaron los forenses.
El informe precisó que “se extrajo muestras de hisopado vaginal y anal en el lugar del hecho, quedando las mismas a cargo del Dr. Zabala. Se solicita pericia química para confirmar semen y biológica para probable ADN”.

“El tiempo me dio la razón”

El bioquímico Daniel Zabala declaró hoy por más de cuatro horas. Al salir, en diálogo con la prensa, lamentó que hayan criticado su trabajo. “Me cuestionan a mí que encontré el ADN. Le están dando más valor a lo que dicen de Córdoba”, afirmó.
Y añadió: “Mi labor fue muy muy cuestionada, inclusive no sé si sirvió. Uno de los cuestionamientos es que yo haya usado fosfatasa ácida y nunca usé fosfatasa ácida. Siempre, desde el 2006, dije fosfatasa ácida prostática”.

  • ¿Esperaba este nivel de cuestionamiento?
  • “No, yo pensé que me iban a felicitar porque con poco material se pudo hacer muchas cosas”.

“Se equivocan al cuestionar mi técnica con otra técnica que mencionan ellos que yo no hice. Me citaron a los autores de todo el mundo pero lo que yo hice constar es que las pruebas se hicieron bien, se detectó semen y se pudo hacer el cotejo de ADN”, sostuvo Zabala.
El perito resaltó: “No les importó el objetivo al que se llegó, les importó cuestionarme el protocolo, que es un protocolo que yo he hecho 20 años a la época del hecho y siempre con resultados positivos”.
“En el sobreseimiento de Facundo Macarrón, uno de los pilares donde se fundamentó esa sentencia es que el ADN no vino a nombre de Facundo sino de otra persona (Marcelo Macarrón)”, indicó.
Y agregó: “Me afectó que, durante horas, hayan cuestionado mi trabajo que sirvió para obtener el ADN. Está bien, puedo tener una metodología que no es de protocolo internacional, como el abogado Brito me citó 10 autores. Le dije: ¿me está tomando examen?”.
“Creo que el juicio está bien orientado para el abogado defensor. Córdoba cuestionó mi hallazgo y en vez de cuestionar a Córdoba por no encontrar, me cuestionan a mí que encontré (ADN). Le están dando más valor a Córdoba”, puntualizó.

Relación consentida

El forense Martín Subirachs declaró en el juicio a Marcelo Macarrón y ratificó que Nora Dalmasso “tuvo una relación consentida, contemporánea a su muerte”. Además, ante el Tribunal y los jurados populares habló de un “puñado de pelos” en la mano de la víctima.
“Estoy conforme con poder haber contado la verdad, defender nuestro trabajo. Desde diciembre de 2006 nos cuestionaron desde la defensa. Pensábamos que no nos iban a llamar y yo, particularmente, quería hablar”, manifestó.
El forense recordó que “el 26 de noviembre de 2006 le dijimos al fiscal (Javier Di Santo) y al comisario (Sergio) Comugnaro que hubo una relación consentida y lo ratificamos con el tiempo”
“Nosotros descartamos rotundamente una violación porque no había evidencia científica de que fuera una violación. La muerte fue contemporánea al acto sexual”, sostuvo.
Subirachs manifestó que “un brote de celos o una discusión podría haber provocado que el autor la matara con un lazo”
“No veo al asesino como un profesional. Si usted contrata a un sicario para matar a su mujer, ¿usted la dejaría desnuda, con un lazo en el cuello? No se, un robo seguido de muerte que se lo come todo el mundo. De todos modos, la parte médica es una parte de la investigación. Para nosotros, fue un crimen pasional”, describió.
El médico dijo que “había un puñado de pelo en la mano de la víctima y estimo que no era de ella, si había cabello de la víctima en el lazo”
“Nora intentó defenderse hasta que la empiezan a vencer físicamente y se desvanece. Desde el punto de vista médico legal dijimos que hace años el caso estaba cerrado. También señalamos que no fue premeditado. Hubo un momento disparador, no se qué, que generó que el asesino tomara el cinto de la bata. Yo solo hablo de las lesiones del cadáver, no sobre la escena del crimen”, insistió.
Subirachs resaltó que “el ADN es la base más importante en la medicina legal en los últimos 20 años”
“El ADN pone en la escena del crimen. Salvo que crean que el ADN llegó volando. El fiscal (Daniel) Miralles lo tomó y este fiscal (Luis) Pizarro desestimó la prueba, desestimó el aporte de los médicos forenses y desestimó el trabajo del bioquímico (Daniel) Zabala. Yo no digo que Macarrón sea el asesino, pero te pone en la escena del crimen”, argumentó.
Y añadió: “No había ADN de Gastón Zárate ni de Facundo Macarrón. Se utilizó ese elemento científico para sobreseerlo y luego, lo desestimaron. Hicieron un cotejo con más de 20 personas porque decían que había contaminación y todas las muestras dieron negativas. Hay un solo ADN con una persona, con nombre y apellido. Bueno, ya está”.
“Nunca, ni antes ni después de esta causa, pasamos por esto. La familia quería evitar el valor de la prueba genética, hasta salieron a decir que la mataron en otro lado. ¿Por qué? por que querían desestimar la prueba genética”, aseveró.

Redacción Póster Central – Así son las Cosas