10 consejos para jurados populares: Por Jericles


Se vienen resonantes juicios con jurados populares y a cualquiera le puede tocar en suerte salir sorteado para tener que dictar justicia… ¡Qué momento, ¿no?!
Como en este programa no damos puntada sin hilo, convocamos al juez Raúl Ricardo Alconada De la Riestra (el Cara ‘e Cepiyo” para sus amigos) para que nos ilustre con su sabiduría en preguntas que se hacen los que son elegidos mediante un sorteo jurados populares y no tienen la menor idea de lo que significa impartir justicia.
Que es lo que no puede hacer un jurado o una jurada popular:

1) Nunca, bajo ninguna circunstancia, se lo puede condenar al reo a capotón furioso

2) Si el reo es condenado a perpetua, el jurado popular se puede subir arriba del banco y gritarlo como un gol, diciéndole “La tenés adentro? (para eso es popular)

3) El jurado, ante una duda no se puede parar en el estrado y dirigirse al juez en estos términos: “Escuchame, cara é quirquincho con dolor de cogote”

4) Otro fallo que no puede hacer el jurado popular es condenarlo al reo a escribir cien veces “No debo acuchillar al almacenero porque no me quiso fiar un tetra”

5) Tampoco podés llevar a tus amigos a Tribunales, para que te hagan barra gritándote: “Hacelo bolsa, cabezón” “Cabeza, clávale perpetua!”

6) Una jurada popular debe guardar un mínimo decoro a la hora de fallar, no puede ser que la máxima autoridad le llame la atención porque a la hora de dictar sentencia se esté transando a su compañerito de banco

7) Algunas de las exposiciones de los testigos son algo tediosas… ¡Pero suena irrespetuoso a que en esos momentos aburridos armen una partida de generala entre los miembros del jurado popular!

8) El jurado popular está inhabilitado para hacer comentarios mientras es interrogado el reo. Por ejemplo, cuando el querellante le pregunte al acusado que hacía la noche del 3 de abril del año pasado, no puede gritarle “¡Hacía de pata ‘e lana!”

9) ¡Un jurado popular que se precie, al oir el testimonio de la víctima narrando el delito,no puede bajo ningún concepto, saltar indignado al estrado y meterle un par de piñones al reo!

10) Y cerramos con un consejo de oro para el tipito o la tipita que fue sorteado jurado popular: ¡Bajo ninguna circunstancia puede reunirse con el abogado querellante, y decirle “Estoy convencido que el reo es inocente… ¡Pero si vos me tirás diez lucas puedo cambiar de idea!”