Biografía no autorizada de Sobre Monte
Por Jericles
Seguimos de festejo por la Semana Aniversario de Río Cuarto, porque hoy nuestra historiadora Felicitas del Pilar Dorrego nos trae una semblanza única, descarnada, del fundador de Río Cuarto…¡El Marqués de SobreMonte!
Su nombre completo era Rafael de SobreMonte, Núñez, Castillo, Ramírez, Bulo, Angulo y Orellano. Después se sacó los apellidos Bulo, Angulo y Orellano, porque sus compañeritos de cole le hacían bullyng con la rima.
Nació en Sevilla el 27 de noviembre de 1745. Es aquí donde se produce el primer chisporroteo entre sus historiadores: mientras nuestra revisionista Felicitas del Pilar Dorrego sostiene que nació de parto natural, Felipe Pigna jura que SobreMontellegó al mundo a través de una complicada cesárea.
En su adolescencia en España, el Rafa tenía una vocación de fierro: quería ser pirata. Se ve que ya de joven aspiraba a andar llevando de un lado a otro cofres llenos de oro y plata. Pero su padre, que era más realista, con paciencia y a fuerza de cintazos lo convenció de que su verdadera vocación era la carrera militar, que con el tiempo lo llevaría al Virreynato del Río de la Plata.
En 1783 es promovido a gobernador de Córdoba. De su paso por esta ciudad durante más de una década al Rafase le pegaron dos cosas: la tonada cordobesa y la capacidad para el retruque burlón, típica de esta región. Cuentan que mientras huía de los invasores ingleses con su carroza repleta de joyas, le preguntaron:
-¿Vais a esconderlas en algún lugar secreto del interior?
-¡No, si las vuá llevar a las Islas Caiman!
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En Córdoba formó familia y tuvo doce hijos, la mayoría de ellos sospechosamente parecidos al aguatero. O no tan sospechoso, teniendo en cuenta que debido a sus múltiples actividades como gobernante y fundador, el Marqués sólo regresaba a su casa cada seis meses.
Años más tarde, debido a la necesidad de contar con una capital alternativa para la Docta, viaja a la frontera sur con su séquito y funda la Villa de la Concepción del Río Cuarto. ¡Ese viaje de Córdoba a Río Cuarto le costó una fortuna, porque en aquella época en la Autovía había una cabina de peaje cada diez kilómetros!
A comienzos del Siglo 19, el Rey de España lo designa Virrey del Río de la Plata, y en 1806, durante la época de las invasiones inglesas, SobreMontese hace famoso por una reprochableactitud, ya que huyó de Buenos Aires con las joyas al grito de “¡Voy a comprar aceite para defender la ciudad y vuelvo!”
Tiempo después, el Marqués confesó que el cofre lleno de oro con el que huyó era para pagar el depósito de garantía para el alquiler de una vivienda. Dijo: “¡Es que acá en Buenos Aires no tienen ni idea de cómo te arrancan la cabeza las inmobiliarias de Córdoba!”
En un cabildo abierto pedido por el pueblo de Buenos Aires, SobreMonte es suspendido, arrestado y enviado a España para ser juzgado. El Marqués regresó a la Madre Patria en 1809 y una vez allá le comentó a los Reyes, igual que Macri dos siglos después, la angustia que le provocaba a nuestros patriotas de la futura revolución tener que separarse de la Corona Española.
En 1827, muere en Cádiz a los 81 años, y sus allegados pusieron este sentido homenaje en su lápida:
“Aquí yace SobreMonte
En este gris cementerio
El que un día, bien drogado
Agarró y fundó el Imperio”
