Los malabares del peronismo: La danza de nombres que preocupa al Palacio de Mójica

Las encuestas, incluso las del radicalismo, revelan una amplia diferencia en favor de Juan Manuel Llamosas en busca de su reelección. Sin embargo, en el Palacio de Mójica no quieren dividir el voto peronista en una ciudad tradicionalmente ligada al radicalismo desde 1983.
Esta semana, las críticas de la legisladora Adriana Nazario impactaron en el riñón del justicialismo y abrieron el interrogante sobre una eventual postulación de la ex diputada y ministra provincial. Aunque Nazario dijo que “no es tiempo de hablar de candidaturas”, la campaña se acelera sobre el final del año en un proceso electoral que podría ser muy breve.
En declaraciones a LV16, la ex diputada afirmó que “le falta bastante a la ciudad” y agregó: “las ciudades no se pueden dar el lujo de tirar la basura, hay que discutir ciertas cosas, hacer una ciudad con un enfoque holístico, no se puede tomar decisiones que involucren a los empresarios y éstos estén afuera. Hay que discutir el perfil estratégico de la ciudad”.
Llamosas intentó bajar el tono de la discusión y aseguró que Nazario -quien es legisladora electa, aunque se tomaría licencia – forma parte de su gobierno a través de la alianza que a nivel provincial lidera Juan Schiaretti.


A la espera del armado de listas de concejales y tribunos de cuentas, que podrían sumar a los rebeldes y contener a otros espacios, en Hacemos por Córdoba creen que “algunos se tiran a la pileta para negociar lugares”.
Por ahora, el peronismo tiene como pre candidato al ex jefe de la Policía, Oscar Zuin -en representación de Rodríguez Saa-, y revela a un motivado Mauricio Dova, al menos, en las redes sociales.


Tampoco se descarta que el kirchnerismo sume a un postulante y en el abanico de opciones surgen Sergio Rivarola y Hernán Vaca Narvaja.

Ninguno de ellos manifestó públicamente intenciones de disputar el sillón de Mójica, pero las encuestas ya miden sus posibilidades.


Vaca Narvaja, integrante del albertismo riocuartense y la Comisión Municipal de la Memoria, impulsó el respaldo a la subsecretaria de Derechos Humanos Daniela Miranda, en medio de las críticas de la Mesa de la Diversidad. En el municipio, valoraron el gesto y no esperan que Alberto Fernández intente jugar en la primera elección después de las presidenciales de octubre.
En el gobierno municipal confían en que finalmente el kirchnerismo -al menos parte- y el albertismo, formarán parte de la coalición para mantener el poder en la ciudad. Si el acuerdo no llega, al menos esperan que no se conviertan en rivales de turno.
“Alberto no va romper con el Gringo ahora. La elección de Río Cuarto no tiene impacto nacional de relevancia. El resultado de la elección se reduce al otro día se reduce a un par de párrafos en Clarín, no mucho más”, afirmó a Póster Central un dirigente del PJ local.
A través de algunos referentes cercanos a Fernández, el llamosismo intenta comenzar a gestionar recursos en la Casa Rosada y evitará cualquier roce que profundice el frío vínculo entre el presidente y Schiaretti, distanciados por la boleta corta y la “neutralidad” en las últimas elecciones.

El alivio en un contexto de indefiniciones llega desde la oposición. El radicalismo no logró contener antes y después de las internas a todos los sectores y el PRO evalúa impulsar un candidato propio. Manuel Betorz, Humberto Benedetto, Eduardo Scoppa y Miguel Besso son algunas referencias que no aparecen en la foto con Gabriel Abrile.

En Respeto la situación es aún más compleja. La suspensión de Pablo Carrizo les arrebató peso electoral y el tiempo juega a contramano del hallazgo de un paliativo para la fuga de votos que implicaría la ausencia del ex concejal en las listas.