Murió Pepe Mujica: El recuerdo de su reconocimiento como doctor honoris causa de la UNRC

La muerte del notable dirigente político uruguayo, José Pepe Mujica, genera un profundo dolor en toda Latinoamérica. En sus 87 años, el ex presidente uruguayo recibió el título de Doctor Honoris Causa de la Universidad Nacional de Río Cuarto, en una ceremonia que se realizó en Montevideo.
El acto en el edificio central de la Universidad de la República, la casa de estudios pública más importante del país oriental, mostró a un dirigente “sobrio, con su habla intercalada por prologadas pausas, y de sereno aspecto campesino y leguaje llano, abundante cabellera canosa, más blanca que sus bigotes”
La descripción del parte oficial de la Universidad lo describió como “una celebridad mundial de aspecto cansino” y resaltó que Mujica se reveló como “el personaje más popular de la política latinoamericana, de trascendencia global, el extupamaro que conoció los límites de la supervivencia, resistió y eligió la libertad para actuar de acuerdo con sus convicciones”.
“Sentado en el centro de una prominente mesa semicircular que ocupa casi por completo el estrado de este espacio tan caro para esa institución, donde se concretó la ceremonia, el histórico líder de la izquierda uruguaya agradeció el título de Doctor Honoris Causa de la UNRC”, precisaron.
El “Pepe” llegó acompañado por su esposa Lucía Topolansky, tímida y cabizbaja, su fiel compañera política, con la que se casó en 2005, dirigente del Movimiento de Participación Popular y vicepresidenta de Uruguay entre 2017 y 2020.
El ex rector Roberto Rovere puso en manos del homenajeado la resolución del nombramiento y dos obsequios: una colección de diez libros del escritor Juan Filloy, reeditados por la editorial de la UNRC, y una manta de vicuña, hecha por artesanos del Noroeste argentino.
Antes se habían cantado los himnos nacionales de Argentina y Uruguay.
Un puñado de gente integró la comitiva riocuartense, todos llegaron con la ilusión de encontrarse con este hombre que, aunque tan real, es un raro ejemplar de la fauna política, que ha hecho culto a la coherencia y a un modo de vida austero, más allá de los meandros descriptos en su trayectoria.