“Nos arremangamos para sacar el agua que ingresó a mares al Hospital, el Gobierno se olvidó de nosotros y de nuestras luchas”

 “Nos arremangamos para sacar el agua que ingresó a mares al Hospital, el Gobierno se olvidó de nosotros y de nuestras luchas”, advirtió Germán Suaznabar, enfermero del Hospital de Río Cuarto.
Suaznbar precisó en diálogo con Póster Central que “la tormenta de este viernes fue importante, cayó mucha de agua en poco tiempo, por lo que hay cañerías tapadas y ventanas rotas”.
“El agua desbordó el Hospital. Los trabajadores del Hospital se arremangaron y empezaron a sacar agua. Esto es para que el Gobierno sepa que nosotros tenemos puesta la camiseta de salud. Fue terrible lo que sucedió en la guardia de pediatría, era un mar. El agua de la calle ingresaba al Hospital”, advirtió.
Y agregó: “Lamentablemente el personal de limpieza no daba a vasto y los enfermeros y administrativos comenzaron a descalzarse para sacar el agua”.
“También los padres y madres colaboraron. Esto sucede por la falta de presupuesto en salud. Falta personal, insumos y mantenimiento en el Hospital. Hace años que estamos sin aire acondicionado. Esto no es un lujo. A los pacientes les da el sol todo el día en pleno verano y hace años que no hay una solución”, lamentó.
El enfermero del nosocomio admitió que “hay una decadencia en el mantenimiento del Hospital”.
“Tenemos muchos factores que influyen. Hay baños rotos que no se pueden arreglar, azulejos que se caen y otras millones de cosas. En la pandemia todo el personal de salud, desde el administrativo hasta el camillero, puso el alma. Todos trabajaron para contener a ese paciente. Hay un montón de eslabones que no pueden fallar”, subrayó.
Y añadió: “En la pandemia se  luchó. Tuvimos compañeros fallecidos. Hoy estamos olvidados por el Gobierno. Se olvidaron los aplausos y las lágrimas que hemos derrochado”.
“Tenemos gente de planta permanente, contratos indefinidos y los contratos covid que son más precarios. Y después aparecieron los monotributistas que cobran 70 mil pesos trabajando, pero si se enferman, no cobra. Cuando un compañero estuvo internado tuvimos que hacer una rifa para pagarle el tratamiento”, resaltó.
El trabajador de salud dijo que está “muy orgulloso de ser enfermero y lo elegiría otra vez”. “Es una actividad muy sacrificada. No tenemos día del padre, año nuevo ni navidad. Estamos pendientes siempre del trabajo. Tenemos emociones por un paciente que fallece y después tenés que volver a tu casa. Y esto no está reflejado en la mirada del gobierno”.
“Hoy tenemos bonos en el sueldo que no van al básico, casi 20 mil pesos. En cualquier momento los pueden quitar. No nos tiene en cuenta, pero cuando nos convocaron allí estuvimos siempre”, aseveró.
Suaznabar dijo que “el Hospital está recargado por una demanda de una amplia región”.
“Son cada vez más pacientes y se necesitan más recursos humanos. Estamos enojados con los gremios, somos trabajadores autoconvocados y queremos respuestas”, lanzó.