La Justicia sumó la declaración de otras dos mujeres que aseguraron haber sido víctimas de intentos de secuestro

La Justicia sumó la declaración de otras dos mujeres que aseguraron haber sido víctimas de intentos de secuestro en ´Río Cuarto. Las presentaciones en la fiscalía del doctor Javier Di Santo se sumaron a la denuncia de una joven de 22 años, quien advirtió que un grupo de hombres la agredieron e intentaron secuestrarla la semana pasada, en pleno centro. El relato generó una fuerte preocupación social.
Oriana Valdéz, relató que “entre la medianoche y la 1,30 de la madrugada del viernes”, fue sorprendida por un auto rojo que comenzó a perseguirla por calle Alvear al 500.
“Volvía caminando por calle Alvear a mi casa, y me empezó a seguir un auto rojo. Tres hombres. Me gritaron cosas durante una cuadra, iban despacito y en un momento escuchó que dos abren la puerta y se bajan. Empiezo a correr, uno me agarra del brazo”, precisó.
La joven destacó que el agresor la tironeó y ella, cayó al piso. “Les empiezo a pegar patadas con los zapatos y a gritar. Aparecieron dos pibas corriendo, y a los segundos un patrullero. Ellos, todos tapados y encapuchados de negro, se subieron y salieron a la huida. Incluso con la puerta del baúl abierta”.
“Me salvaron, y no se como agradecérselo porque entre la crisis y el shock jamás pregunté sus nombres. Río Cuarto no es más seguro. Mucho menos para las mujeres. TENGAN CUIDADO, porque se que lo vienen sufriendo varias pibas el último tiempo (mismo modus operandi). Rabia, dolor y tristeza no poder hacer libremente lo que una quiera. Incluso da muchísima tristeza y miedo de que haya gente la cual goce de hacerle daño a mujeres”, destacó.
Oriana, quien es estudiante de abogacía, publicó inicialmente la denuncia en su cuenta de Twitter y el sábado, formalizó la presentación en la Unidad Judicial.

El fiscal de Instrucción Javier Di Santo ordenó que se investiguen las cámaras que están en la vía pública, comercios y viviendas ubicados en el sector donde Oriana denunció haber sufrido el intento de secuestro.
También solicitaron informes sobre los móviles policiales que transitaban por el sector. Uno de los elementos que llamó la atención en la Policía es que el agente que habría arribado al lugar, según surge de la denuncia, no hubiese convocado a un servicio de emergencias ni hubiera advertido a otras unidades.
La joven precisó a Poster Central que “el auto era rojo parecía que se abría desde adentro por el conductor”. Recordó que había dos personas que “estaban de negro, de pies a cabeza”
Quien intentó agarrarla, era más alto que la joven y comenzó “a zamarrearla”. Oriana manifestó que el médico policial “constató lesiones en el brazo y la espalda” y destacó la necesidad de ayuda psicológica por el conmocionante episodio.
Desde la secretaría de la Mujer se comunicaron con la denunciante para poner a disposición los equipos técnicos.